
La pesca ilegal e indiscriminada en el Mar Argentino es una problemática cada vez más alarmante. Según señala Luisina Vueso, coordinadora de la campaña de Océanos de Greenpeace, esta actividad ilegal se concentra principalmente en aguas internacionales, en el límite de la Milla 200, donde Argentina tiene jurisdicción. Esta zona, conocida como el Agujero Azul, es uno de los principales corredores biológicos del mar y su depredación por parte de buques “piratas” provenientes principalmente de China, es una amenaza para los ecosistemas marinos.
La problemática se ha vuelto aún más preocupante debido a la falta de regulación en esta zona. Según Vueso, “esto habilita que cientos de buques pesqueros vengan desde el otro lado del mundo a pescar en esa zona”, lo que ha generado una presión pesquera terrible en el Agujero Azul y en los ecosistemas marinos.
Ante esta situación, desde Greenpeace se ha venido impulsando un tratado global de los océanos que permita tener herramientas para proteger esta zona. Además, desde Argentina se está trabajando en el Senado un proyecto de ley que busca crear un área marina protegida con el objetivo de proteger la zona de la pesca de arrastre, considerada como la más terrible y destructiva.
La pesca ilegal en el Mar Argentino es una problemática que afecta a los ecosistemas marinos y a las comunidades de pesca artesanal del país. Es necesaria una acción inmediata para proteger esta zona y evitar la depredación que está ocurriendo. El Agujero Azul es una zona productiva y vital para la biodiversidad marina, es necesario actuar para proteger

Al ser consultado por MULTIMEDIO Norberto carini explico: “Estamos trabajando fuertemente en esta temática porque es fundamental avanzar en la protección del mar argentino y de las aguas internacionales. Este año nos enfocaremos además en el avance de la industria offshore, algo que venimos haciendo en los últimos dos o tres años, junto a muchas organizaciones”, cerró.